Esta maceta colgante está elaborada con media cáscara de coco, o sea que más natural no puede ser. Esto sí que es aprovechar los recursos de la naturaleza de forma sostenible. Así que la próxima vez que abras un coco guárdate la cáscara y podrás crear dos macetas colgantes originales y cien por cien naturales. Vamos a ver el desarrollo de esta transformación.
Para decorar la terraza, el porche o cualquier rincón bien iluminado de nuestra casa estas macetas colgantes son una buena solución.
Materiales:
Media cáscara de coco.
Cuerda fina.
Cuentas de madera.
Pintura.
Cinta adhesiva de pintor.
Taladro.
Primero colocamos la cinta adhesiva para delimitar la zona a pintar. Podemos hacer el diseño que prefiramos, este aspecto es totalmente libre y a gusto de cada uno.
Realizaremos cuatro orificios en el contorno de la cáscara para pasar las cuerdas. Y haremos también un orificio en la parte central para drenaje.
Por los orificios practicados alrededor de la cáscara pasaremos los trozos de cuerda, usaremos las cuentas para que actúen a modo de freno y también como elemento decorativo.
Cuando tengamos las cuerdas pasadas las uniremos en el extremo superior para formar el enganche por donde colgaremos la maceta al techo.
Podemos realizar algún tipo de trenzado con los hilos para que queden bien unidos o simplemente atarlos a una anilla. Prepararemos el sustrato para realizar la plantación o siembra.
Nos servirá para muchos tipos de plantas desde suculentas hasta anuales. Podemos plantar lo que más nos guste, las suculentas nos irán muy bien pues la capa de sustrato obviamente no puede ser muy profunda.
Queda muy bien si incluimos en la siembra alguna planta con caída por el gran efecto decorativo que producen al colgarlas.
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